miércoles, 28 de agosto de 2013

Nos pueden tachar de lo que quieran.

Hay chicas que odiarían estar con alguien como tú. No soportarían que su chico disfrutase tanto jugando videojuegos o mirando en internet, o hablando de ordenadores. Pero así me enamoraste, y no te quiero cambiar. Porque gracias a todo lo que me has enseñado a disfrutar, tengo en mi corazón 500 TeraBytes reservados para ti, veo la vida a 1080p y no me falta RAM ni capacidad para disfrutar de cada segundo a tu lado.
Así te quiero,


Porque prefiero mil veces un novio que juegue,
 a un novio que mienta. 

Si eres diferente, eres como los demás.

Vaya, parece ser que la creatividad de la sociedad llega hasta puntos insospechados.
Ahora, para estar a la moda, no hay que seguir modas, ¿Alguien me lo puede explicar? Antes todo el mundo buscaba un colectivo al que parecerse, unas personas afines a ellas para no sentirse solas en el mundo... Ahora, es al revés. Si una persona se parece a ti, "te copia".
¿Pero de qué habláis? ¿Cómo puede haber tanto falserío en este maldito mundo?
No soporto la gente que intenta ser lo que no es, pero peor es el que no soporta que quizás no sea tan "único" en este mundo.
Aceptadlo, malditos egoístas egocéntricos: Nadie puede cambiar su personalidad más propia, su seña. A quien le guste el azul, le gustará el azul por mucho que se obligue a si mismo a que le guste más el rojo. Y porque a una persona le guste el azul como a ti, no te tiene por qué estar copiando, ni mintiendo ser quien no es. 

Dejad un poco de ser tan "modas", 
y sed más personas.

lunes, 19 de agosto de 2013

Y cuando por fin lo encuentro...

Nada me duele más que haber encontrado lo que andaba buscado y no poder dar ya el siguiente paso.

Make it look near my dear.

domingo, 18 de agosto de 2013

Timeless.

Esas personas que hacen que parezca que no ha pasado el tiempo, o que simplemente no importa que haya pasado, porque ese buen royo que teníais no se va.
Y aunque ya no estén a tu lado tan aferrados como antes, los ves un día por casualidad y piensas... No parece que haya pasado un año desde la última vez que hablamos.
Esa gente, que entienden el trascurso de la vida y no olvidan los buenos momentos.


Porque así, no me siento yo tan rara 
entre la gente del resto del universo.

martes, 13 de agosto de 2013

Cuando los nervios lo son todo.

En ese momento estás sola. Nadie de los que te han acompañado en el camino van a estar contigo ahora.
Te paras a pensar en cada vez que ensayaste y repetiste... y no te puedes creer que ya haya llegado el momento.
Es todo o nada, justo ahora y tu cuerpo parece no poder soportar la presión.
Cuando te quedas sola ahí arriba, el pánico se te pega a los músculos y te hace temblar. Tus piernas, tus manos... todo tiembla. Se encienden los focos y ahí apareces tú, sintiéndote un cervatillo a punto de ser atropellado, pero cuando la música empieza, todo fluye solo. La primera nota es la peor y piensas que no podrá salir ni un leve sonido de tu boca. Pero sale... va solo, aunque sientas que se te escapa la vida en tu voz.
Pero cuando llega el fin, el tan ansiado fin, en esa última nota lo das todo.
Y luego, silencio.
Ese silencio, es por el que merece la pena el esfuerzo. El silencio en el que inspiras profundamente y ya sabes lo que va a pasar, porque sabes lo que te has esforzado y que esos dos minutos, te han cambiado otra vez la vida.
Finalmente, si tienes suerte, vienen los aplausos.


Aunque eso es lo que menos te importa en ese momento.

martes, 6 de agosto de 2013

Así me siento libre.

No entiendo a esa gente que, diciendo hablar en nombre de la libertad, te dicen que eres demasiado joven para tener pareja, que no deberías pasar tanto tiempo con esa persona o que te estás perdiendo tu juventud y cuando tengas 40 años, estaréis hartos el uno del otro.
Pero no se dan cuenta de que yo no pude elegir el momento en el que conocí a esa persona, que cada minuto que paso a su lado me vale por mil más sintiéndome vacía y que él es el que me hace sentirme joven y sentir que estoy en mi lugar en el mundo. Que sí, que quizás no todo dure para siempre, pero en 40 años, podré sonreír recordando mi juventud, porque amé y me amaron con el alma y el corazón.
Porque libertad no es tener las puertas abiertas y andar de los labios de uno a los de otros.
Es tener las puertas abiertas a conocer otros labios y que tú tengas la libertad de decidir quedarte en los que de verdad merece la pena.


Palabras que no nos solemos decir.

Aunque no te lo diga a menudo, días como hoy me hacen darme cuenta de lo importante que eres para mi.
Que fuiste mi ilusión un día y de tanto desearlo llegaste al mundo, haciendo que el sueño se volviera realidad. Que mi vida cambió cuando tú llegaste a ella y que no te cambiaría por nada del universo. Aunque nos peleemos y a veces nos digamos cosas horribles, que nosotros sabemos que lo hacemos sin pensar, tú eres quizás la cosa que más me mantiene los pies en el suelo y a la vez, la que más me hace ver las estrellas con solo mirarme o con una risa tuya. Que estoy segura de que yo nací para cuidarte y que toda palabra se queda corta cuando me paro a pensar en ti. 
Y por eso hoy te doy las gracias a ti y solo a ti, por ser la única persona que no me aguanta, que me dice las cosas claras y sin medias tintas. Por picarme, por simplemente joderme a veces y por las peleas que tenemos por mi escasa paciencia y tus interminables ganas de hacerme rabiar. Porque si no fuera por ti, yo no sabría lo que es el amor incondicional. Ese que no lo buscas ni llegas a él, si no que está en ti, sin más y lo llena todo. No llegas a querer a alguien así por una razón, simplemente llega al instante de conocer a esa persona... o antes incluso. 
Yo ya te quería más que a nada antes de conocerte y hubiera dado la vida por ti sin pensármelo. 
Porque es así y pase lo que pase así será: TE QUIERO, fuerte e incontrolablemente y me tendrás ahí siempre, pase lo que tenga que pasar en nuestras vidas.


 Porque soy tu hermana
y no hace falta decir nada más.

lunes, 5 de agosto de 2013

Mirrors

Me encantaría a veces solo mirarme en el espejo y sonreír como haces tú cuando me miras.
Y lo intento, pero, de veras... Yo no encuentro esas ganas de sonreír por ningún lado del reflejo.


jueves, 1 de agosto de 2013

Eso me da por pensar.

A veces escucho historias estúpidas en la televisión. De esas que llegan a tus oídos aunque no quieras de amores y desamores de gentucha del mundillo rosa. Y como tonta me pongo a pensar: "Pero vaya con esa idiota... ¿Pero como vas a estar con una persona que no te valora?" "¿Pero cómo puede alguien dejarse manipular por alguien así?"
Pero de pronto caigo en la cuenta, de qué fácil es ver todo detrás de la barrera. Y me da por recordar que quizás yo no soy la más adecuada para hablar del tema. Y me trago mis palabras. 



Antes de que venga alguien
a hacérmelas tragar a la fuerza.